Otra para la exposición de Sestao. Se trata de los balcones de la emblemática "Casa de La Galana", declarada edificio protegible recientemente... que acumula más de un siglo de historia. Conocida como 'corrala', el edificio llama la atención por sus singulares balconadas de madera. Es el único testimonio que se ha conservado, pese a que este modelo era muy habitual en la arquitectura vizcaína de finales del siglo XIX. Cuentan que Don Enrique Aja, alias el 'Galán', que tenía una casa-tienda en Chávarri, se mudó a este bloque y a su muerte su viuda, joven, bella y muy elegante, heredó su apodo. Al parecer, la pretendieron muchos hombres, que al no ser correspondidos extendieron el rumor de que esta mujer había hecho de su hogar una casa de citas. De ahí el nombre de La Galana. Ahora en el número 1 de la calle Nicolás Ormaetxea queda el último vestigio de una concepción intermedia entre el barracón y la vivienda tradicional.
Estas pequeñas viviendas, de apenas 50 metros cuadrados de superficie, tuvieron a una 'ilustre' vecina entre sus paredes. «En el tercero izquierda vivía la tía de Felipe González, Isabel González».
Mucha historia. Arches 26 x 36 cm grueso.
Estas pequeñas viviendas, de apenas 50 metros cuadrados de superficie, tuvieron a una 'ilustre' vecina entre sus paredes. «En el tercero izquierda vivía la tía de Felipe González, Isabel González».
Mucha historia. Arches 26 x 36 cm grueso.